Los Alquimistas de la Naturaleza: Cómo los Hongos Están Redefiniendo el Futuro del Plástico
- lavanderia Guizado
- 19 ago
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Prólogo: Una Crisis de Materiales y una Solución Silenciosa
En un mundo saturado de objetos de un solo uso, el plástico se ha convertido en el símbolo de la conveniencia moderna y, al mismo tiempo, en una de las crisis ambientales más apremiantes de nuestro tiempo. Desde la bolsa de supermercado hasta los componentes de los aparatos electrónicos, los polímeros sintéticos están en todas partes. Su durabilidad, una de sus principales ventajas, es también su mayor inconveniente, ya que los plásticos se diseñaron para perdurar durante siglos, superando la vida útil de quienes los crearon. El dilema es monumental: ¿cómo podemos gestionar y eliminar un material que, por su propia naturaleza, se resiste a desaparecer?
En medio de esta crisis, la respuesta podría estar emergiendo de los lugares más inesperados. En silencio, pero con una firmeza poderosa, la naturaleza está ofreciendo una pista fascinante. Un equipo de científicos ha descubierto que ciertos organismos, en particular los hongos, han evolucionado para encontrar una fuente de alimento en lo que para nosotros es un desecho indestructible.1 Estos "alquimistas" microbianos están reescribiendo las reglas de la degradación y ofreciendo un rayo de esperanza. Los hallazgos, aunque aún en etapa de investigación, sugieren que la solución a la contaminación plástica podría no provenir de grandes fábricas, sino de la inteligencia intrínseca de la propia Tierra.
Un Atlas de la Biorremediación: Conoce a los Hongos Degradadores de Plástico
La capacidad de descomponer plástico no es una habilidad exclusiva de un único "superhongo", sino una respuesta evolutiva que se ha observado en una variedad de especies adaptadas a entornos muy diferentes. Este catálogo de descubrimientos es como un atlas de la biorremediación, donde cada organismo ofrece una solución contextual y especializada para un problema específico.
El Pionero de la Amazonía: Pestalotiopsis microspora
El primer gran avance en este campo se produjo con el descubrimiento del hongo Pestalotiopsis microspora. Este endófito, un organismo que vive dentro de los tejidos de las plantas sin causarles daño, fue hallado en 2011 por un grupo de estudiantes de la Universidad de Yale durante una expedición a la selva ecuatoriana, específicamente en el Parque nacional Yasuní.1 La capacidad crucial de este hongo no solo radica en que puede descomponer el poliuretano (PUR), un polímero común en fibras sintéticas y espumas, sino que lo hace incluso en ausencia de oxígeno, es decir, en condiciones anaeróbicas.1 Esta característica es fundamental, ya que la mayoría de los residuos plásticos terminan enterrados en vertederos o sumergidos, donde la falta de oxígeno hace que otros métodos de degradación sean ineficaces. En condiciones ideales de laboratorio, este hongo demostró una impresionante tasa de degradación: el 90% del plástico en solo 45 días.5

El Oportunista del Vertedero: Aspergillus tubingensis
A diferencia de su contraparte amazónica, el hongo Aspergillus tubingensis fue descubierto en el vertedero de Pakistán, un entorno claramente contaminado.1 Este hallazgo es significativo porque sugiere una adaptación directa de la especie para prosperar en un ambiente rico en desechos plásticos. Al igual que el hongo de la Amazonía, también descompone el poliuretano, pero lo hace a un ritmo notable, en "cuestión de semanas", lo que refuerza la idea de que la naturaleza ha comenzado a desarrollar soluciones en los mismos lugares donde se ha creado el problema.1
El Limpiador de los Océanos: Parengyodontium album
La contaminación plástica en los océanos requiere una solución diferente. Recientemente, un hongo marino llamado Parengyodontium album se unió a una lista muy corta de solo cuatro especies capaces de degradar plástico en este tipo de entorno.6 Este hongo fue descubierto coexistiendo con otros microbios en capas finas de residuos plásticos flotantes.6 Lo más destacable es que se alimenta del polietileno (PE), el tipo de plástico más abundante en los océanos.6 No obstante, este proceso está intrínsecamente ligado a la exposición a la luz ultravioleta (UV) del sol, lo que lo limita a la degradación del plástico que flota en la superficie. A un ritmo de aproximadamente 0.05% por día, su acción puede parecer lenta, pero es un indicio valioso de cómo los ecosistemas marinos podrían estar desarrollando sus propias defensas.6
Los Especialistas en Frío: Neodevriesia y Lachnellula
La adaptabilidad del reino fungi se extiende incluso a los entornos más inhóspitos. En un estudio realizado en los Alpes suizos y en el Ártico, se descubrieron hongos de los géneros Neodevriesia y Lachnellula que poseen la extraordinaria habilidad de digerir plásticos biodegradables a bajas temperaturas, de hasta 15°C.9 Estos hongos se alimentan de plásticos como el poliuretano y el PBAT/PLA, comúnmente utilizados en bolsas compostables, lo que demuestra que la capacidad de biodegradación está presente en una amplia gama de condiciones extremas. Este hallazgo subraya que la capacidad de degradar plásticos no es un fenómeno aislado, sino una respuesta evolutiva que se manifiesta en múltiples ecosistemas. Cada uno de estos descubrimientos en entornos distintos (anaeróbico, expuesto a la luz UV, en frío) valida la idea de que la estrategia más efectiva para la biorremediación no será un único organismo universal, sino un conjunto de soluciones biológicas. Se podrían usar diferentes cepas o sus enzimas para limpiar tipos específicos de plástico en vertederos, océanos o regiones polares, lo que convierte la solución a la contaminación plástica en un "cóctel" de organismos adaptados en lugar de un salvador solitario.
El Mecanismo Mágico-Científico: ¿Cómo Ocurre la Biodegradación?
La aparente "magia" de los hongos es, en realidad, un proceso biológico fascinante y bien establecido. Por su naturaleza, los hongos son descomponedores que liberan enzimas al entorno para romper moléculas complejas y absorber los nutrientes resultantes. En el caso de los plásticos, estas especies han "aprendido" a producir enzimas especializadas que funcionan como "tijeras moleculares", atacando y rompiendo los enlaces químicos que mantienen unidos a los polímeros plásticos.3 Por ejemplo, se ha identificado que el hongo
Pestalotiopsis microspora utiliza enzimas conocidas como serina hidrolasas para degradar el poliuretano.4
Una pregunta clave en esta investigación es qué sucede con el plástico una vez que es degradado. Los estudios sugieren que el material se descompone principalmente en dióxido de carbono (CO2), agua y otros compuestos orgánicos útiles.6 Se ha planteado la preocupación de que este proceso pueda contribuir a la liberación de gases de efecto invernadero. Sin embargo, en el caso del hongo marino
Parengyodontium album, el informe aclara que la cantidad de CO2 liberada es ínfima, comparable a la que exhalamos los seres humanos al respirar, por lo que no se crea un nuevo problema climático a gran escala.6
Un aspecto particularmente interesante es la sinergia entre los factores ambientales y la actividad de los hongos. El estudio del hongo marino Parengyodontium album reveló que la presencia de luz ultravioleta (UV) es un factor crucial para su capacidad de degradación.6 Aunque la luz solar ya descompone el plástico mecánicamente, la investigación demostró que la exposición a la luz UV también facilita su descomposición biológica por parte del hongo, mostrando una cooperación entre la biología y el entorno. Esto contrasta con la capacidad del
Pestalotiopsis microspora para trabajar sin oxígeno, lo que lo hace idóneo para vertederos.1
La investigación en este campo no se detiene en el descubrimiento del hongo en sí. El siguiente paso crítico es aislar y replicar las enzimas que hacen el trabajo. Los científicos están trabajando para "identificar y optimizar" estas enzimas para que sean más eficientes y estables.9 La existencia de tecnologías 'ómicas' como la genómica y la proteómica permite a los investigadores mapear los genes y las proteínas responsables de la degradación, acelerando este proceso.11 Esta fase de investigación representa un punto de inflexión crucial. La aplicación más prometedora no es liberar hongos en la naturaleza de forma incontrolable, sino aislar y replicar las enzimas más potentes en biorreactores industriales. Esto transforma una solución biológica lenta y contextual en un proceso biotecnológico regulado, más rápido y escalable, que podría revolucionar el "biorreciclaje" de plásticos.
Un Esfuerzo de Ecosistema: Más Allá del Reino Fungi
Para comprender verdaderamente el panorama de la biorremediación, es importante reconocer que los hongos no son los únicos organismos que luchan contra el plástico. En el vasto ecosistema de la vida microbiana, otros actores también desempeñan un papel fundamental. En Japón, por ejemplo, se descubrió la bacteria Ideonella sakaiensis en un centro de reciclaje, capaz de degradar el poli(tereftalato de etileno), o PET, el plástico utilizado para fabricar las botellas de bebidas.12 Esta bacteria utiliza dos enzimas específicas, la PETasa y la MHETasa, para descomponer este material.12
Además de las bacterias, otros organismos como los insectos y las lombrices también están siendo estudiados por su potencial para convertir residuos plásticos en materiales biodegradables.13 Estos hallazgos demuestran que la lucha contra la contaminación plástica es un esfuerzo de ecosistema, y que los hongos, las bacterias y otros organismos forman una red de soluciones complementarias. No se trata de una competencia por un único salvador, sino del desarrollo de un campo emergente que combina diversas herramientas biológicas para abordar el problema desde múltiples frentes.
Más Allá de los Titulares: Desafíos y la Hoja de Ruta para la Implementación a Gran Escala
A pesar de que los descubrimientos son prometedores, la transición de un hallazgo de laboratorio a una solución industrial viable presenta desafíos significativos. El principal de ellos es la disparidad en las tasas de degradación. Si bien algunos hongos son relativamente rápidos, otros, como el hongo marino Parengyodontium album, con una tasa de 0.05% por día, son lentos para los estándares de un modelo de reciclaje comercial.6
El enigma principal es la identificación y optimización de las enzimas. Es la frontera actual de la investigación: los científicos necesitan encontrar las enzimas más eficientes, hacerlas más estables y, sobre todo, aprender a producirlas a gran escala para que el proceso sea económicamente viable.9 Además, la implementación en el mundo real conlleva la dificultad de replicar las condiciones de laboratorio. Por ejemplo, ¿cómo se escala el proceso anaeróbico del
Pestalotiopsis microspora? ¿Cómo se asegura que el plástico en el océano reciba suficiente exposición a la luz UV para que el hongo marino funcione?
Sin embargo, el valor de estos descubrimientos no se mide únicamente por su velocidad. La adaptabilidad a entornos difíciles es igual o incluso más importante. La capacidad de los hongos para funcionar sin oxígeno en vertederos, a bajas temperaturas en regiones polares, o en sinergia con la luz UV en la superficie del océano, transforma la narrativa de "lento" a "especializado." La verdadera promesa de la biorremediación no está en la velocidad universal del proceso, sino en su capacidad para abordar problemas de contaminación en nichos específicos y difíciles donde otras soluciones no funcionan. La naturaleza nos está proporcionando herramientas especializadas para cada contexto, y el siguiente paso es que la biotecnología aprenda a utilizarlas de manera estratégica.
Conclusión: Un Vistazo a un Futuro de Opciones más Inteligentes
Los descubrimientos de hongos que degradan el plástico representan un paso monumental hacia un futuro donde la contaminación plástica no sea una sentencia de siglos. Hemos visto que no se trata de una única solución, sino de un diverso conjunto de organismos, cada uno adaptado para descomponer un tipo de plástico en un entorno específico. El mecanismo detrás de su acción, la liberación de enzimas especializadas, es una poderosa pista que la naturaleza nos ha dado.
Aunque los desafíos de la implementación a gran escala son reales, la investigación en biotecnología para aislar y optimizar estas enzimas está avanzando rápidamente. El futuro promete la creación de soluciones de biorreciclaje inteligentes y contextuales, que trabajen con la biología del planeta en lugar de contra ella. Estos humildes hongos nos han demostrado que incluso los problemas más grandes de la humanidad pueden tener una solución elegante y natural. Apoyar esta ciencia y la investigación en soluciones sostenibles es el camino hacia un futuro más limpio y consciente.
Obras citadas
Hongos que comen plástico: la naturaleza nos da una pista - Eres Radio, fecha de acceso: agosto 14, 2025, https://eresradio.bo/blogs/hongos-que-comen-plastico-la-naturaleza-nos-da-una-pista-OL16596190
es.wikipedia.org, fecha de acceso: agosto 14, 2025, https://es.wikipedia.org/wiki/Pestalotiopsis_microspora#:~:text=Esporas%20de%20Pestalotiopsis%20microspora.&text=Este%20hongo%20fue%20encontrado%20en,Parque%20nacional%20Yasun%C3%AD%20(PNY).
Descubren un hongo que descompone el plástico - Europa Press, fecha de acceso: agosto 14, 2025, https://www.europapress.es/ciencia/laboratorio/noticia-descubren-hongo-descompone-plastico-20110810120408.html
Pestalotiopsis microspora - EcuRed, fecha de acceso: agosto 14, 2025, https://www.ecured.cu/Pestalotiopsis_microspora
Hongo que devora el plástico - YouTube, fecha de acceso: agosto 14, 2025, https://m.youtube.com/shorts/OqjyYOWSJ0E
Hallan un hongo capaz de degradar el plástico - Comunidad ISM, fecha de acceso: agosto 14, 2025, https://www.comunidadism.es/actualidad/hallan-un-hongo-capaz-de-descomponer-el-plastico/
¿Sabías que hay un hongo que "come" plástico? Parengyodontium alb... | TikTok, fecha de acceso: agosto 14, 2025, https://www.tiktok.com/@soypatriciasenent/video/7389705226334276897
Hongo marino es capaz de descomponer el plástico de los océanos, fecha de acceso: agosto 14, 2025, https://es-us.noticias.yahoo.com/hongo-marino-capaz-descomponer-pl%C3%A1stico-235045189.html
Se descubren hongos que comen plástico en los Alpes suizos - SWI ..., fecha de acceso: agosto 14, 2025, https://www.swissinfo.ch/spa/ciencia/se-descubren-hongos-que-comen-pl%C3%A1stico-en-los-alpes-suizos/48501698
Hongos degradadores de plástico: ¿Por qué ayudan al ecosistema ..., fecha de acceso: agosto 14, 2025, https://www.produccionsustentable.com/index.php/2025/01/16/hongos-degradadores-de-plastico-por-que-ayudan-al-ecosistema/
"Enzimas, Ómicas y Bioinformática en el Combate Contra la Contaminación por Plásticos", fecha de acceso: agosto 14, 2025, https://ciatej.mx/el-ciatej/comunicacion/Noticias/-Enzimas--Omicas-y-Bioinformatica-en-el-Combate-Contra-la-Contaminacion-por-Plasticos-/334
La bacteria que “come” botellas PET : Revista Pesquisa Fapesp, fecha de acceso: agosto 14, 2025, https://revistapesquisa.fapesp.br/es/la-bacteria-que-come-botellas-pet/
Investigadores consiguen degradar plástico usando hongos - Residuos Profesional, fecha de acceso: agosto 14, 2025, https://www.residuosprofesional.com/degradar-plastico-hongos/
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